Las coberturas no siempre son en un 100%
Muchas personas se sorprenden de que el momento de cobrar la indemnización de cualquier tipo de seguros generales, tienen que pagar un monto que no es cubierto por la compañía aseguradora, o lo que se conoce comúnmente como deducible. Esta situación suele disgustar a los clientes, sin embargo, es algo que ocurre con frecuencia y cumple totalmente con la legalidad, ya que aquella cifra que debe pagar el asegurado está contemplada por contrato en la póliza.
Uno de los ejemplos más claros en que el asegurado debe pagar un deducible es lo que sucede con los seguros contra robo. En este tipo de seguros, las compañías aseguradoras suelen cubrir una cierta cantidad de dinero, pero al superar este monto, el cliente siempre deberá hacerse cargo del resto del dinero.
Otro de los seguros que contemplan un deducible son los seguros automotriz. Estos seguros cubren los daños del vehículo asegurado, ya sea de manera total o parcial. En el caso que la cobertura sea parcial, el asegurado deberá hacerse cargo del dinero faltante.
También es importante tener en cuenta que las coberturas totales no siempre cubren el valor total del automóvil asegurado, ya que suelen establecer montos máximos de cobertura. Por esta razón los expertos recomiendan siempre buscar asesoría en seguros.
Leave a Comment